Esta semana estuve con muchas cosas en mi cabeza.. para variar. Por un lado, la sensación térmica que vivimos en casa, por el otro lado, algunos proyectos e ideas que están tomando forma.
En el último post contaba sobre el trabajo de hormiga, cómo se va poco a poco llegando a destino, trabajando cuidadosamente el terreno que uno va pisando.
Esta semana, empezó en domingo en realidad. Ya que el domingo fui a Amsterdam a un indoor vrijmarkt (mercado libre adentro, o sea no afuera si se entiende..). Me había invitado una chica holandesa que conocí en un
kledingruilbeurs hace un tiempo atrás. Como se llama como mi hija, y además resultó ser una persona encantadora, continuamos el contacto después de aquella vez, más que nada a través de Facebook.