sábado, 29 de octubre de 2011

Green inspires me

Una vida verde. Vivimos en un momento de cambio, una evolución que emerge desde adentro y resplandece en la superficie de todo lo que nos rodea.
Yo creo que todos tenemos algo verde en nuestro ser.

El color verde está asociado con muchas cosas.. los árboles y las plantas, el medio ambiente, la ecología, pero incluso los dólares..

Los dólares no me inspiran, pero el bosque que tengo cerca de mi casa sí.

Qué importante es tener ese oasis en medio de una ciudad.
Lelystad es una ciudad verde y azul, rodeada de agua y mucho mucho verde.
Aunque también es gris, porque es una ciudad nueva. No hay edificios históricos ni trazas de una vida pasada.




Sin embargo, hay mucho verde. Muchos árboles y muchos parques. Y canales bordeados de plantas que se alzan como soles en la tempestad.


A mí el verde me inspira. Me da nuevos bríos, serenidad. Me ayuda a dormir mejor, me purifica el alma.

Y ahora que es otoño están las hojas desparramándose por doquier. Cuando abro la puerta de mi casa, se invitan las hojas al calor de mi hogar..

Me gusta la transición del verano al invierno haciendo escala en el otoño. Es una estación con algo de pérdida, que llena de nostalgia. Que nos va preparando para lo que vendrá, el fín del año en esta parte del mundo.

Anoche soñé con la nieve, con copos cristalinos deshaciéndose en mis manos.


Será quizás la melancolía que me tiene así. O algo verde que crece dentro de mi corazón.



Las hojas se tornasolan, el iridiscente verde transmuta por el arte de la magia en tonos color carmín y marrón. Son colores fuertes, cálidos que van empapelando la ciudad, creando mullidos colchones que hacen cric crac cuando caminamos sobre ellos.

En unos meses vendrá el crudo invierno. Será frío y será duro.
Me gusta creer que el verde que me entra por los ojos, se queda en algún lugar de mi alma.

Quizás me dé sosiego cuando la luz se vuelva tenue y los árboles se desnuden, rasgando con sus ramas el cielo, mirando con sus ojos grandes cómo se desenvuelven el sol y la luna.

Absortos con la mirada perdida, congelada en una postal de un momento que se evaporó.

El verde que me inspira, verde esperanza, verde vida.
Me abrazo al mundo desde mi mirada verde, llena de hojas y contemplando la belleza del bosque en otoño.

Se respira aquí otro aire, nuevo, fresco. Aire de cambio.
And the sky turns green into the dust of words..

Me voy a caminar.


2 comentarios:

valeria dijo...

Tu sueño tal vez signifique que vas a superar los obstáculos.Me gusta mucho la foto del corazón verde creciendo en el árbol y tu metáfora. No te me pongas triste en el invierno. Todas las estaciones tienen su encanto, solo hay que intentar comprender el sentido...y si es en Holanda hay que hacer un esfuercito más. Un abrazo!

Unknown dijo...

Hola Valeria, sí quizás tengas razón.. eso de los sueños es todo un dilema :)La foto del árbol y su corazón me sorprendió a mí también.. todas las fotos las hice con mi teléfono, fueron momentos especiales.
Lo del invierno no me entristece, es lo que hay, quizás más que el invierno lo que más me molesta es el frío polar.. pero me da ganas de festejar la navidad y la calidez de mi estufa a leña es algo que siempre me gusta disfrutar.. todo tiene sus pros y contras..
Otro abrazo!